Aprovechando la presencia de hermanas de diversas regiones, el 26 de abril se realizó un espacio de reflexión sobre el camino recorrido en el proceso de regionalización en América Latina. Las hermanas del Sur y del Norte compartieron el estado de sus procesos, identificando puntos comunes y desafíos. Este encuentro permitió reconocerse mutuamente y asumir con mayor conciencia el llamado a construir juntas una nueva forma de caminar en comunión, tejiendo así una historia común desde la diversidad.
El 27 de abril, las hermanas contemplativas se reunieron para compartir sus experiencias, sueños y proyecciones hacia el futuro dentro del proceso de regionalización. Más tarde, junto con las animadoras provinciales y el ELC, sostuvieron un diálogo abierto y esperanzador sobre cómo seguir fortaleciendo la vida contemplativa en este nuevo contexto. Finalmente, el 28 de abril, las animadoras provinciales y el ELC se reunieron para recoger y reflexionar sobre todo lo vivido durante los días anteriores, consolidando así los frutos de un proceso marcado por la apertura, la escucha y la búsqueda conjunta de horizontes comunes.